¿FIN DE CICLO?

Resultado del partido de ida de las semifinales de Champions 2013.

Este resultado da para mucho y no lo digo por los goles, sino por todo lo que conlleva. He de reconocer que leí y escuché bastantes opiniones sobre este partido de la boca de los mejores especialistas del panorama futbolístico español y todos decían que el mejor Bayern se iba a encontrar con el peor Barcelona de la temporada y así ha sido. La victoria no tiene discusión alguna, aunque algunos se quieran escudar en el arbitraje. Los alemanes han ido a por el partido desde el minuto 1, con una actitud  encomiable. Sabían que delante tenían al mejor equipo del mundo, pero herido  y había que hacer sangre de eso. 

¿Por qué ha cambiado tanto este Barca? Recordemos por un instante que hablamos del mejor equipo de todos los tiempos, con un estilo propio y que ha maravillado al mundo con su forma de jugar. Posesión, posesión y más posesión y dinamita arriba para llenar sus vitrinas de trofeos. Pero este año han habido varios cambios dentro del club. Por un lado se marchó el maestro que hizo de este club lo que es hoy día, hablo de Pep Guardiola, el artífice de todo esto. Un hueco muy difícil de reemplazar, aunque muchos ignorantemente daban a Tito Vilanova como el genio de este Barca  a las órdenes de Pep y que todo marcharía igual o mejor. Comenzaron arrasando en la liga, récord de puntos, de victorias, todo iba sobre rueda. Luego llegaron los primeros problemas, las enfermedades tanto de Tito como de Abidal, mermaron la moral de la plantilla...y eso se hace notar. Pero futbolísticamente hablando, el gran error ha sido no estar a la altura en los partidos importantes y no saber dosificar a la plantilla. 

Muchos han salido de la cueva para alegrarse del fracaso blaugrana.

Si por casualidad no hemos seguido ambas ligas durante el año, os menciono que tanto el campeonato español, como el alemán, ya se decidieron hace muchos meses, a día de hoy el Barcelona le saca al Madrid 13 puntos, y el Bayern al Dortmund nada más y nada menos que 20 puntos. ¿Pero dónde ha estado la diferencia? En mi opinión en la sombra alargada de Pep. Tito comenzó con unos números espectaculares, superando incluso lo realizado por Guardiola, no sé si le pudo el ego o la enfermedad lo puso entre la espada y la pared a la hora de tomar decisiones, pero no ha hecho las cosas de forma coherente. Mientras su colega alemán, con la liga decidida, se dedicó a rotar al once inicial, Tito optó por mantener el mismo once, salvo lesión o sanción, con la esperanza de seguir reventando récords. Y el resultado ha sido catastrófico. Un Barca roto físicamente, donde a los futbolistas les pesaban las piernas, sin fuelle, arrastrándose por el campo. Mientras que los alemanes bien dosificados, eran auténticas avionetas. Primer gran error. 

Portada del diario Marca.

El segundo gran error que en mi modesta opinión le he visto al Barca de Tito, es que este no ha sabido leer los partidos importantes. El Barca de Pep pasaba literalmente por encima del Madrid, a excepción de la final de la copa del Rey. Este nuevo Barca, no ha podido con el Madrid, ni en la Supercopa de España, ni en la copa del Rey, ni tan siquiera en la liga. Y el planteamiento de hoy lo ha dejado manifiesto, el cambio...tarde y mal.

No comparto lo de final de ciclo, ¿ por qué? Sencillamente porque no hay razón para creerlo. Un equipo que se ha paseado por esta liga, la cual ganó allá por el mes de diciembre, que llegó a las semifinales de la copa del  rey, que está jugando la semifinal de la Champions y que cuenta con una plantilla repleta de canteranos y de jóvenes jugadores, no creo que esté hundida. Si es cierto que habrá que retocar un poco el equipo: buscar un portero, fichar algún central, y fichar pólvora arriba para ayudar a Messi cuando tiene las luces apagadas.

Aunque a muchos les pese, tendremos Barca para rato.

No me gustaría cerrar este artículo sin hacer mención al feo gesto de Jordi Alba. Por un lado la mayoría de jugadores blaugranas salieron delante de la prensa a dar la cara sobre el partido y reconocieron la supremacía de los alemanes. Pero este señor mostró su mal perder al lanzar un balón a la cara de Robben. Le deberían dar un tirón de orejas y recordarle el equipo al que representa.

Momento en que Jordi lanza el balón a Robben.